El decreto 2362 de 2018, establece que “quienes deseen portar un arma deben pasar por un proceso de evaluación y análisis que, eventualmente, les da la posibilidad de tener un permiso de porte. Al estar suspendidos estos permisos, solo quienes obtengan permiso especial podrán portar un arma”. Esta directiva reduce el número de personas que ya no son objeto de excepciones, pues se establece que los ministros, concejales y funcionarios del Ministerio de defensa, deberán pasar por el mismo proceso de evaluación que cualquier persona natural. Esta prohibición se mantendrá vigente todo el año 2020.
DECRETO 2409 DEL 30 DICIEMBRE DE 2019